INNOVACIÓN Y TRANSFORMACIÓN
El pasado miércoles 8 de abril, participé en un webinar organizado por MET Community, comunidad en la que participo como mentor, con el título “Innovación y transformación: consejos prácticos en tiempos de incertidumbre”.
Lo primero que me llamó la atención fue que estábamos conectados 98 personas de USA, Colombia, Bolivia, Perú, México, … Madrid y Bilbao y además con tres horarios distintos. Algo impensable no hace mucho y que la tecnología, y la actual situación de confinamiento, nos ha facilitado la práctica de estas reuniones virtuales.
Durante una hora, 4 ponentes (Yanire Braña, Pilar Troncoso, Nelson Mora e Ignacio Villoch) nos fueron exponiendo sus ideas, algunas de las cuales me gustaría comentar. El planteamiento para superar esta crisis sanitaria, económica y social fue el de un proceso 3R en tres pasos: Reacción, Resiliencia y Reinvención, con consejos prácticos para cada uno de estos pasos.
El primero REACCIÓN, no podemos quedarnos parados esperando a que alguien o el tiempo solucione nuestro problema, y lo primero que nos aconsejan es “observar y aplicar el sentido común”: hay que adaptarse a los cambios y tendremos que volver a ser los emprendedores que fuimos en su día, pero con mucha más experiencia y más herramientas. Hay que tomar medidas en la organización, empezando por la seguridad para la salud de todos los trabajadores y a continuación las medidas financieras para la supervivencia de la empresa, asegurando la liquidez y tesorería, aprovechando todas las facilidades que nos aporte la administración. Además, habrá que tomar medidas operacionales (teletrabajo, digitalización de procesos, …) y adaptar y dimensionar la organización a la nueva situación (creatividad y compromiso para no tener que prescindir de nadie), todo ello con una intensa comunicación y transparencia.
La concepción y planificación del corto, medio y largo plazo, pasa a ser semana, mes y seis meses como máximo. Tenemos que ser conscientes de que estamos siendo testigos de un momento transcendental para la humanidad, y ante esto caben tres actitudes que nos posicionan en tres posibles zonas y nos marcan un posible camino de superación:
Zona del Miedo: nos quejamos a menudo, me irrito con facilidad, busco culpables, compro compulsivamente, reenvío todos los mensajes sin contrastar, contagio emociones de miedo e ira.
Zona de Aprendizaje: Tomo conciencia de la situación y pienso cómo actuar, dejo de consumir lo que me hace daño (noticias, alimentos, ...) identifico mis emociones, contrasto la información antes de difundirla, reconozco que la mayoría estamos tratando de dar lo mejor de nosotros mismos.
Zona de Crecimiento: Encuentro un propósito, vivo el presente y me enfoco al futuro, busco adaptarme a los cambios, pienso en los demás y en cómo puedo ayudar, pongo mis talentos al servicio de quién lo necesite, soy empático, agradezco y valoro, me mantengo alegre y contagio esperanza, practico el sosiego, la paciencia, las relaciones y la creatividad.
El segundo paso RESILIENCIA, o la capacidad de recuperar el estado primitivo, adaptándonos al nuevo mundo VUCA (volátil, incierto, complejo y ambiguo) con dos ingredientes necesarios: la tecnología, con todas las posibilidades que nos ofrece, y la humanidad, con su creatividad, intuición y todo aquello que nos distingue de los robots. Comportamientos clave para esta transformación como son la hipercolaboración (interesante el artículo reciente de Yuval Noah Harari en el Financial Times: The world after coronavirus) el aprendizaje flexible a lo largo de toda la vida, la experimentación constante y las competencias disruptivas.
Y finalmente REINVENTARNOS:” Cuando los vientos del cambio soplan, unos levantan murallas, otros construyen molinos”. Tenemos que replantearnos nuestros modelos de negocio ante las oportunidades que se nos abren. El emprendimiento (buscar soluciones) la sostenibilidad (sin comprometer a las generaciones futuras) y la innovación (cambios que aporten valor) encuentran en los Objetivos de Desarrollo Sostenible ODS 2030 un mapa de acción, donde los 17 objetivos con sus 169 metas nos ofrecen al menos otras tantas oportunidades para contribuir al desarrollo económico, social y medioambiental, sin dejar a nadie atrás y velando por la sostenibilidad del planeta.
La desconfianza masiva requerirá nuevos liderazgos que primen la salud, el bienestar y la sostenibilidad y apoyen la ciencia y la investigación, la industria y la tecnología, la cultura, el reconocimiento, la colaboración, el ahorro, …
Estos consejos prácticos me han llevado a recordar los ciclos de Kondratieff, economista ruso que hace ya 100 años publicó “The Mayor Economics Cycles” donde planteaba que se producían ciclos de 4 fases: prosperidad, recesión, depresión y mejora; ciclos que se repetían cada 60 años aproximadamente y coincidían con grandes guerras, catástrofes o pandemias, seguidas de grandes novedades tecnológicas que generaban la mejora y prosperidad. Estos ciclos se han venido a llamar las “innovation waves” y se han ido acortando sensiblemente por el crecimiento exponencial de la ciencia y la tecnología y la ausencia de grandes guerras.
Esta pandemia pasará antes o después y empezará una nueva etapa de mejora y prosperidad de la mano de las innovaciones que ofrecen la inteligencia artificial, el internet de las cosas, el Big Data, la realidad virtual y aumentada, los drones y robots, la impresión 3D, la edición del ADN y la medicina personalizada, … y por supuesto la filosofía, la sociología, las ciencias humanas que no debemos de perder de vista en este futuro mundo dominado aparentemente por el STEAM.
Los que estén preparados saldrán reforzados de esta crisis sin precedentes, pero la cuestión es si lo haremos sin dejar a nadie atrás y con un planeta más sostenible.
